Black Panther: Wakanda Forever
Bajo la dirección de Ryan Coogler, y con un metraje de 2 horas y 40 minutos, llegó a los cines Wakanda Forever, la segunda entrega de Black Panther. Una entrega que muchos esperaban, luego del éxito de la primera cinta, y que ahora tenía un gran atenuante, la falta de su protagonista, T’Challa, protagonizado por Chadwick Boseman, quien falleció el 2020 producto del cáncer de colón.
La muerte del rey T’Challa, por una enfermedad, devastó al pueblo de Wakanda y le dio rienda suelta al mundo para intentar tomar sus recursos por la razón o la fuerza. La reina Ramonda, Shuri y las Dora Milaje se encargaron de proteger al pueblo y las reservas de Vibranium de los invasores, pero no solo tuvieron este problema, ya que desde occidente dieron con una guarnición de Vibranium en el fondo del mar. Esto le trajo problemas a Wakanda, ya que los reinos de las profundidades, gobernados por Namor, los culpan de la invasión extranjera y piden alianza o muerte en su lucha de conquista.
Wakanda Forever es una excelente película. Un film lleno de emotividad, un metraje hecho homenaje para Chadwick Boseman. El respeto con el que trataron al personaje y al actor, sumado a la combinación de culturas, tanto las africanas representadas con Wakanda, como las mesoamericanas representadas con la cultura de Talokán, muestran respeto y admiración, apreciando las culturas ancestrales, sin querer apropiarse de ellas y dándoles una propia interpretación, inspirándose en estas, más no usurpándolas ni faltándoles el respeto.
Las actuaciones del cast son otro aspecto destacable en este film, desde la incorporación de Tenoch Huerta (Namor) y Dominique Thorne (Riri Williams), hasta los recurrentes como Angela Bassett (Reina Ramonda), Lupita Nyong’o (Nakia), Danai Guira (Okoye), Winston Duke (M’Baku) y cómo no, la principal, Letitia Wright, que interpreta a Shuri, la sucesora y la Pantera Negra.
Los giros argumentales de la película, la propia evolución del personaje de Shuri de cómo lidiar con su pérdida, hasta el final de la película están perfectamente construidos. El como la propia Princesa Shuri, debe entender a unir la tecnología con sus tradiciones ancestrales, es otro de los aspectos que enriquecen y valorizan mucho más a este personaje.
El film me gustó bastante, y no se siente, por momentos, como una película de Marvel. Debe ser lo mejor que han sacado en esta fase cuatro, que se ha tornado bastante polémica dentro de los fans, ya que cuenta con opiniones divididas para los diferentes productos que ha entregado Marvel Studios, desde sus series, hasta las nuevas películas post Avengers: EndGame.
A nivel musical, otra vez Wakanda Forever resalta al igual que su predecesora, y con piezas musicales mucho más épicas y emotivas, sumadas a las que representan a Talokán, que son absolutamente preciosas. Con respecto al diseño de vestuario y maquillaje, Wakanda Forever vuelve a poner la nota alta con un excelente diseño para la cultura submarina y para los wakandianos, desarrollando nuevos diseños tecnológicos para algunas guerreras y un nuevo suite de Black Panther que se ve espectacular.
Lo mejor del año de Marvel tuvo que esperar hasta el final del año 2022, no cabe duda que Black Panther: Wakanda Forever, cerró de buena forma u 8.4n año de altibajos para la industria.
Nota: 8.5