Blancanieves: Un deseo contra la marea

Fecha de estreno: 20 de marzo de 2025
Dirección: Marc Webb
Disponible en: Disney+
Basada en: Blancanieves y los siete enanitos (1937) y el cuento de los Hermanos Grimm
Presupuesto: USD $270 millones
Recaudación: USD $86.1 millones (aproximadamente)
Duración: 109 minutos
Protagonista: Rachel Zegler
Género: Fantasía, Musical, Aventura


No cabe duda de que Blancanieves live action se gestó envuelta en un marco de polémica. Desde la elección de Rachel Zegler como protagonista, hasta los dichos de ella misma durante la gira de prensa de la película. Que si la polémica de los enanos, que si Blancanieves feminista, que si gente que ni siquiera vio la película la empezó a destruir con las notas más bajas en portales de cine. Todo mal para una entrega que, la verdad, no es tan mala como se ha querido instalar.

Esta versión de Blancanieves nos cuenta la misma historia clásica que Disney presentó por allá por los años 30. Sin embargo, le entrega pequeños toques de profundidad que se agradecen: hay contexto con sus padres, una breve exploración del origen de la Reina Malvada y una narrativa que, aunque superficial, sitúa a los personajes en una dinámica de opresión y revolución. No va más allá de lo simbólico, pero dentro del tono del film, eso basta.

Se nota que hubo una película diferente antes de esta. En un comienzo, el plan incluía a los famosos “siete inclusivos”, una mezcla de etnias y alturas que generó polémica, pero que terminaron reconvertidos en bandidos. Aún así, se las arreglan para encajar bien en el relato. Además, el cambio de origen de Blancanieves tiene sentido en otras versiones del cuento clásico (como la italiana), así que para los que critican sin leer… mejor estudien un poquito más.

La película se sostiene por dos pilares: su apartado musical y Rachel Zegler. Waiting On A Wish es una tremenda canción que no solo funciona dentro del contexto, sino que permite a Zegler brillar con su talento vocal. Como actriz también cumple muy bien, dando una Blancanieves carismática y soñadora. En cambio, Gal Gadot como la Reina Malvada… un desastre. Físicamente encaja perfecto, pero su interpretación queda demasiado por debajo del estándar que uno esperaría para un personaje tan icónico.

Me gustó la idea del bandido/príncipe, la caída de la Reina a manos del pueblo, y varios momentos musicales. El CGI de los enanos es raro, sí, pero uno se termina acostumbrando. En resumen: no es una obra maestra ni un desastre, sino una película injustamente juzgada que entrega lo justo para una experiencia emocional, nostálgica y visualmente agradable.

Nota final: 7.0 de 10