La trama retoma justo donde quedó la temporada anterior, con un épico enfrentamiento entre Superman y Doomsday, pero esta vez explorando no solo las repercusiones físicas de la batalla, sino también las consecuencias emocionales y familiares que esta tiene en Lois, sus hijos y Smallville en general.
Además, el regreso de Lex Luthor, interpretado por un sorprendente Michael Cudlitz, añade una nueva capa de tensión al conflicto, presentando a un Lex más despiadado y peligroso que nunca.
Las actuaciones se mantienen como uno de los puntos más fuertes del show. Tyler Hoechlin y Elizabeth Tulloch consolidan sus interpretaciones como Clark Kent/Superman y Lois Lane, ofreciendo versiones de los personajes que han sido aclamadas por los fanáticos. Cudlitz, por su parte, reinventa a Luthor, dándole una ira contenida y una presencia intimidante que lo hace un villano digno del Hombre de Acero.
Si bien la serie sigue teniendo los altibajos típicos de un producto de CW, su capacidad para cerrar con finales espectaculares hace que esos detalles sean perdonables. Ha sido un viaje increíble con Superman y Lois, y esta última temporada hace justicia a sus personajes y a la mitología del héroe más grande de todos los tiempos.
Nota final: 9.0. Un cierre digno para una gran serie.
