Shang-Chi y la leyenda de los 10 anillos
La nueva película del MCU, ya no tan nueva a la hora que estoy redactando esto, viene para seguir ampliando todo lo que es MCU. Si bien, en Shang-Chi se menciona lo sucedido con Thanos, trata de una cosa completamente distinta, así que vamos a desmenuzarla.
Shang-Chi es un joven que se hace llamar __ y tiene una mejor amiga llamada Katy. Ambos trabajan en un hotel aparcando autos, una vida simple, pero que les gusta. De pronto, Shang-Chi se ve forzado a usar sus habilidades, de las cuales Katy no tenía idea, y le confianza que él es hijo del mismísimo Mandarín, Xu Wenwu, que es redimido, al menos un poco, en esta entrega, luego de lo realizado en Iron Man 2.
La trama consta de como Shang-Chi debe evitar que su padre abra un portal en Ta Lo. Según el propio mandarín, allí tienen a su amada esposa, así que motivado por aquello, buscará hacer lo necesario para lograrlo. Shang-Chi, por su parte, tendrá que aliarse con la gente de Ta Lo y con Xialing, su hermana, para evitar que su padre cumpla sus objetivos.
Personalmente, para un personaje tan pro como vendieron a este Mandarín, y con tantos años en el planeta, me pareció algo burdo el argumento de que creyera que su amada estaba tras ese portal que liberaba a los moradores de la oscuridad, pero bueno, cositas de Marvel. Sin embargo, en líneas generales, es una película livianita, muy del estilo Marvel, que sirve para introducir a otro héroe más, ahora del oriente, y vamos a ver como utiliza todo esto el MCU en sus próximos productos, porque tenemos las apariciones magistrales de Abominación, que no lo veíamos desde Hulk, y de Wong.
Me parece interesante el concepto de los 10 anillos como objeto, ya que serán dignos de estudio para los entendidos en la materia del MCU, y también de la propia organización, que no me extrañaría ver en alguna serie de Falcon y del propio Hawkeye, o en algo relacionado con el legado de Black Widow con su hermana.
Shang-Chi cumple con lo justo. Una película bella visualmente, con lindos parajes. Se caen un poco en los efectos visuales, que por momentos los encontré inferiores a otras entregas, y con el OTS, que personalmente no me quedó muy grabado en la memoria. Shang-Chi será una entrega que pasó sin pena ni gloria.
Nota: 6.7