Bernardo y Bianca (1977)

Debo ser honesto, esta, junto al «Gran Dinosaurio», eran las películas que menos quería ver. El Gran Dinosaurio no decepcionó en esa consigna, pero Bernardo y Bianca si me agradaron. Vamos a la reseña.

Bernardo es un ratón que oficia como auxiliar en la «ONU» de ratones. Bianca la ratona delegada de Hungría. Ambos se reúnen porque hubo convocatoria para todos los delegados de la ONU debido a una botella encontrada en la orilla. Esta botella contenía un mensaje de ayuda de una pequeña llamada Penny. Bianca, valerosa, decide ir en la misión y llevar al humilde Bernardo con ella… Pero ¿Cómo dos ratones serán capaces de salvar a una niña?

La película es entretenida. Ambos personajes se complementan bastante bien, y los personajes secundarios que los rodean, en especial Evinrude, son bastante memorables. La pareja villana tiene carisma, y al menos Medusa es bastante odiable. Penny, pobre Penny… ¿Cuántos traumas no albergará luego de todo lo que pasó esta pobre niña?

En relación a la música, es bastante buena y acompaña de buena forma el film. La animación destaca, sobre todo la representación de países, sin caer en el estereotipo más absurdo, logra representar de buena forma a los ratoncitos de las distintas localidades en las que aparecen.

Me parece muy bien lograda la representación de este mundo en relación a como se desenvuelven ellos con otros animales, como los del pantano, el sistema de vuelo y detalles interesantes que de pronto pueden ser vacíos argumentales, como porqué los cocodrilos no hablan, pero que si lo dejamos en superficialidades le aportan bastante a la entrega.