
Arcane (S2): La explosión de la excelencia
La segunda temporada de Arcane llegó con la misma fuerza y calidad que su predecesora, entregándonos tres episodios por semana a partir del 9 de noviembre. Desde su lanzamiento, no dejó dudas: esta serie sigue siendo uno de los productos más ambiciosos y mejor logrados en la animación moderna.
Siguiendo los eventos de la primera temporada, nos sumergimos nuevamente en el conflicto entre Zaun y Piltover, ahora más fracturado que nunca tras la explosión provocada por Jinx. La pregunta que ronda toda la temporada es clara: ¿podrán estas dos facciones superar sus diferencias para enfrentar un enemigo aún mayor?
La serie desarrolla magistralmente este dilema a través de personajes icónicos como Jinx y Vi, mientras que en un segundo plano seguimos la evolución de Viktor y Jayce, con un enfoque también en Ekko, Heimerdinger y uno de los antagonistas más intrigantes de la serie, Singed.
La narrativa es tan envolvente como en su primera entrega, pero el desenlace de esta temporada es algo caótico, impactante y excelso, dejando a los espectadores con una sensación de asombro y vacío existencial que pocas series logran.
Cada episodio es una pieza de arte en movimiento, con una animación impecable y un nivel de detalle que sigue elevando el estándar de la industria.
Sin duda, Arcane sigue siendo una obra maestra, una serie que va más allá de los fans de League of Legends y se posiciona como un referente de calidad en el mundo de la animación. Y lo mejor de todo, se han confirmado tres nuevos proyectos ambientados en Runaterra, dejando atrás a Piltover y Zaun para explorar otras regiones de este vasto universo.
Nota final: 10/10.